domingo, 10 de enero de 2010

El triste cumpleaños del Museo Histórico de Angol


10 de enero, 2010

Señor Director Canal de Noticias.cl:

Un día no lejano me vi en la imperiosa necesidad de poner en venta a mi hijo de 9 años, es decir, nacido el 9 de enero de 2001, cuyo parto doloroso fue costeado por su padrino temuquense, de nacionalidad alemana “FON DART”. Noble muy colaborador con la cultura y lo que se hace en Temuco, porque por todos es sabido, que después de estar en el bautizo en calle Julio Sepúlveda Nº 371, donde lo prometió todo, abandonó a este ahijado a su suerte y jamás se le ocurrió mandar un saludito, ni menos un billetito largo para celebrar a su “protegido”, un simple cumpleaños, sin embargo fue generoso con gente angolina que está “concertada” para adorarlo y que pertenece a la “nova” escuela de las artes o que navega por las “salinas” aguas de la falsa adulación y el descaro.

Hoy, este mozalbete nuevamente está de cumpleaños y casi con una pata fuera de su hogar, ya que en reemplazo de este espléndido local, tipo “COPEVA”, se construirá uno nuevo a prueba incendios y terremotos, considerando que será un lujo en firmeza porque la empresa que lo edificará se llama “Puente Loncomilla”, pero su interior no podrá alojar a marginales particulares ni nada que huela a museo, especialmente cuando su dueño se llama “ReNé UDIlfonso”. Se me adelantó que su administración será especialmente competente y no permitirá ningún “chanchuyo” en las finanzas, porque los jefes vienen impregnados de la más absoluta seriedad adquirida en la directiva de los ferrocarriles del Estado y no tienen la menor idea lo que significa un sobresueldo o despilfarro.

Hace un año, traté de obtener ayuda de un nuevo benefactor de Temuco, don “FNDR” (pongo sus iniciales por ser de personalidad tímida este individuo), pero ocurrió que los mismos que se dedican a criticar las 10 razones para elegir a Piñera, se quedaron con las platas, al igual que si se hubieran “concertado”.

Ante tanta zancadilla y mala suerte, me quise matar en defensa propia y llevarme por delante a este hijo putativo de 9 años para salvar algo de dignidad, pero al meditar sobre el tiempo que había pasado viviendo con migajas y alguna pequeña canasta familiar otorgada por el departamento social de la I. Municipalidad, me dije que no lo había hecho tan mal, ya que por lo menos aprendí a comer botellas y dormir en cama de clavos y si nadie viene a conocer a mi hijo ni a celebrar su monumental memoria , es porque los angolinos conocen muy bien su historia y no tienen tiempo de andar tocándole la cabeza a este cabro lleno de piojos. Por lo tanto hoy 9 de enero, me compraré un jurel tipo salmón y un vinito “sonrisita de tigre” y brindaré para que este hijo, que es el Museo Histórico”, alcance a completar un año más de vida y ya en el próximo, pueda encontrar a su padrino FON DART, ahora sano del extravío de sus ojos, reconociendo a todos sus ahijados, tanto a los que se acercan por la izquierda, como aquellos que venimos por el centro o la derecha, porque se supone, ¡somos todos hijos de Dios!

Fuente de la información: http://www.canaldenoticias.cl/index.php?option=com_content&view=article&id=5195:el-triste-cumpleanos-del-museo-historico-de-angol&catid=78:cartas-al-director&Itemid=140
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